Hola amigos lectores, sean bien recibidos a un nuevo artículo sobre los perros de asistencia. Esta vez me da enorme satisfacción hablar de la mejor escuela de entrenamiento de perros guía que, en mi opinión, existe actualmente en el mundo. Me refiero a Leader Dogs for the Blind, localizada en Rochester Hills, a una distancia no muy lejana de la ciudad de Detroit, Michigan, sede de la industria automotriz que se ubica al norte de los Estados Unidos de América y muy cerca de Canadá.
Sobre Leader Dogs for the Blind, puedo asegurar se ha escrito y se seguirá escribiendo ampliamente, por lo que sería muy fácil retomar la información que aparece en su página Web oficial y en sus demás redes sociales, mismas que anexo al final de este apartado. Sin embargo, prefiero aportar desde mi perspectiva como usuaria de estos nobles canes y expresar mi admiración y sincero agradecimiento a tan loable institución que me ha acogido en cinco ocasiones, brindándome el regalo más maravilloso: un perro guía.
Es un placer hablar de este centro de entrenamiento que, gracias al apoyo de los clubes de Leones ha establecido convenios con fundaciones y escuelas para adiestrar perros guía en favor de las personas con discapacidad visual de diversas nacionalidades. Muestra de ello son los Leader Dogs que se encuentran trabajando en países como Argentina, Canadá, Chile, Colombia, Costa Rica, España, Estados Unidos, Guatemala, Uruguay y, por supuesto, México, entre otros países no menos importantes.
Leader Dogs for the Blind no siempre ha llevado este nombre ni ha tenido la infraestructura del día de hoy. Este sueño comenzó en 1938, año en que Charles A. Nutting, Donald P. Schurr y S.A. Dodge motivaron al Club de Leones de Detroit Uptown, a establecer una escuela para entrenar perros guía y auxiliar a las personas ciegas.
Con el paso del tiempo y gracias a la persistencia de sus fundadores, quienes trabajaron arduamente, lograron que los ojos de estos nobles canes dieran movilidad, seguridad e independencia a las personas ciegas. Es importante destacar que la idea de crear esta escuela se debió al rechazo hacia el Dr. Glenn Wheeler, un compañero de Uptown Lion, cuyos intentos por ser aceptado en otra organización de perros guía no tuvo éxito. Es por eso que los primeros clientes fueron alojados en el Park Avenue Hotel en Detroit y se graduaron en el otoño de 1938.
A partir de ese año se llevaron a cabo importantes acontecimientos, destacando la convocatoria hecha por tres clubes de Leones de Detroit, quienes celebraron un concurso entre todos los clubes de Leones, con el objetivo de buscar un nuevo nombre para su empresa. Más de 500 nombres de todo el mundo participaron, resultando ganador «Leader Lions», presentado por el Club de Leones de Coulterville, Illinois.
Meses después, el 4 de abril de 1939, la fundación Lions Leader Dog se estableció como una organización no lucrativa en Michigan. En mayo de 1939, la fundación arrendó una pequeña granja en Rochester Hills, Michigan, para poner en marcha su nueva aventura, pagando 50 dólares al mes por alquilar una casa de campo para albergar a los clientes y al personal, destinando un establo y un garaje a los perros.
Bajo este contexto, el 8 de octubre de 1939 tuvo lugar la graduación de la primera clase de la fundación oficial Lions Leader Dog, siendo 600 dólares el costo de la graduación del equipo cliente/perro. La escuela se estaba formando y pasaría por algunas modificaciones, la más trascendental fue cuando la Junta Directiva Internacional de Leones solicitó que la palabra «Lions» se removiera del nombre porque no habían autorizado oficialmente el apoyo de la organización, por lo que el 15 de junio de 1940 se dio a conocer su nuevo y definitivo nombre: Leader Dogs for the Blind, nombre con el que se le conoce hasta el día de hoy.
Posteriormente, en la década de los 40 del siglo XX, se consigue un crecimiento adicional de la escuela y, sobre todo, una mayor participación de los clubes de Leones locales y nacionales. Manifestando su apoyo a través de donaciones, la identificación de clientes potenciales y la difusión del trabajo y la misión de Leader Dogs. La casa alquilada, en 1939 tuvo más de 12,000 estudiantes en la residencia hasta su demolición en el año 2003.
En la actualidad, Leader Dogs goza de un prestigio que va más allá de ser uno de los 35 centros de entrenamiento que pertenecen a la Federación Internacional de Escuelas de Perros Guía, con sede en Gran Bretaña; rebasa con mucho sus portentosas instalaciones, el reconocimiento a sus instructores y del magistral entrenamiento de sus perros; esta escuela, en mi opinión, se ha basado en una política de apertura y donación de sus canes a gran parte de Latinoamérica.
Durante muchas décadas, la escuela acrecentó su fama y prestigio por admitir en sus cursos de adiestramiento a estudiantes ciegos procedentes de Latinoamérica, mismos que podían viajar a Leader Dogs en búsqueda de un perro lazarillo que les proporcionara la movilidad e independencia anheladas. Lo que la convirtió en un verdadero paradigma de progresismo, inclusión y sentido humanitario al constituirse como una de las pocas escuelas —si no es que la única— en donar un perro guía a personas ciegas de estos países.
Hoy en día se han dado cambios que han significado un retroceso en los programas de admisión de esta importante escuela, en lo que se refiere a la recepción de estudiantes hispanoparlantes, limitando a quienes desean acudir a sus cursos de entrenamiento por primera vez, como lo hizo Liliana González Holguín en el ya lejano año de 1948, cuando Leader Dogs for the Blind abrió sus puertas a la primera —orgullosamente mexicana— usuaria de perro guía.
No obstante lo anterior, para quienes hemos tenido la oportunidad de asistir a Leader Dogs y disfrutar gratuitamente de los 26 días que dura el curso de entrenamiento, es justo reconocer su sensibilidad hacia las personas ciegas de México y de otros países, así como el trato digno e igualitario por parte de instructores, voluntarios, intérpretes y todo el personal que labora en la residencia.
Además de la donación del perro profesionalmente adiestrado, Leader Dogs ofrece a los futuros usuarios o clientes, hospitalidad y seguridad dentro de sus majestuosas instalaciones; orden, respeto, sana convivencia, puntualidad, limpieza, transporte accesible para los recorridos dentro y fuera de la ciudad de Rochester Hills. En fin, tantas sorpresas más que los usuarios no pueden obtener en sus propios países, haciendo de la adaptación con el perro una experiencia inolvidable y llena de divertidas anécdotas perrunas.
Aún prevalece en mi memoria la emoción que sentí cuando en septiembre de 1998, al pisar Leader Dogs por primera vez, escuché a Greg, mi instructor y uno de los más experimentados de esta prodigiosa escuela, pronunciar las siguientes palabras: “bienvenidos a la mejor escuela de entrenamiento de perros guía del mundo”. Y qué razón tenía en su original recibimiento, pues nos esperaban jornadas de extenso trabajo y adaptación con el perro, así como de gran aprendizaje.
Generalmente, después de una afable bienvenida, los voluntarios de la escuela suelen dar a los clientes o futuros usuarios un detallado recorrido por la residencia, por esa magna construcción en forma de herradura de la buena suerte. Resulta un goce recorrer sus instalaciones: las alas norte y sur, sus amplios y confortables dormitorios con Internet y televisión por cable preparados para albergar hasta 30 binomios, sala de piano, su espacioso comedor y cocina, auditorios de juntas, gimnasio, lavandería, así como el área de juegos, biblioteca y de computadoras.
Quienes hemos disfrutado de la estancia en la residencia es casi imposible resistirse a adquirir algún suvenir de su tienda de regalos. Y mucho menos olvidar el riquísimo olor de su cafetería, la cual está disponible todo el tiempo, lista para preparase un delicioso café, té o chocolate caliente y convivir después de un día de intenso entrenamiento.
La escuela no solamente cuenta con sitios de esparcimiento dedicados a los estudiantes, también los canes disfrutan de amplios espacios para jugar con todas las medidas de seguridad, poniendo atención en los juguetes adecuados para el tipo de trabajo que estos desempeñan.
Leader Dogs está conformada también por un área de perreras modernas y cómodas en donde se cuida y mantiene a los perros en excelente estado y con sistemas modernos para bañarlos. Además de tener un innovador hospital veterinario para atender oportunamente a los perros, constituyendo una prioridad la salud y el cuidado de los canes.
De igual manera, la escuela posee un campo de entrenamiento que simula una pequeña ciudad, con aceras y semáforos, planeados estratégicamente para practicar con los perros. Ciertamente, Leader Dogs se transforma durante el curso de entrenamiento, en una ciudad cosmopolita en donde convergen usuarios de diferentes nacionalidades, idiomas, religiones, ideologías, condición económica, culturas y costumbres. Todos con la misma ilusión de regresar a casa con un perro lazarillo.
Por si lo anterior fuera poco, Leader Dogs cuenta, también, con un centro de entrenamiento ubicado a unos pocos metros de la escuela, en la ciudad de Rochester Hills, cuya entrada conserva unas emblemáticas estatuas de leones que, además de dar la bienvenida a los clientes, nos recuerda la gran visión de futuro y humanismo de los clubes de Leones que fundaron la escuela en 1938.
Sin duda alguna, Leader Dogs es un claro ejemplo de trabajo transparente y de congruencia entre el discurso y la realidad. Es una práctica real de altruismo e inclusión, demostrando al mundo que vale la pena donar e invertir en los ciegos, lo cual debe ser un ejemplo para países como México, en donde no existe una cultura de la donación y del compromiso social (salvo en situaciones de emergencia y desastre).
Finalmente, sería interminable enumerar en este artículo todo lo que simboliza Leader Dogs, escuela muy significativa para los mexicanos que hemos tenido la gran oportunidad de obtener un perro entrenado, por lo que les invito a leer una segunda parte y conocer más de esta increíble escuela de entrenamiento.
¡Hasta la próxima!
Y para quien quiera conocer más de Leader Dogs, aquí anexo su página web:
www.LeaderDog.org
Comments