Por: Dra. Alejandra Suárez González
Los cachorros Schnauzer son perros muy nobles, activos, cariñosos y protectores, por lo que estas características son fundamentales para la raza y nos determinarán mucho del cómo tratar a nuestro cachorro que fue elegido para los shows (Exposiciones de Belleza).
Uno de los momentos más lindos y emocionantes de la crianza es escoger el cachorro idóneo que nos representará en las siguientes muestras de belleza, pero ¿cómo elegimos ese cachorro?, ¿cómo saber cuál es el cachorro correcto?
Es muy difícil elegir al cachorro que se quedará, ya que realmente todas las cruzas son diseñadas para que aporten algo genéticamente necesario y útil para el criadero, fuera de la línea genética se toman muchas cosas para elegir al cachorro que se quedará para ser presentado en las pistas de exposiciones.
A continuación damos un pequeño resumen de las cuatro características más notorias para escoger un cachorrito:
Estructura
Nuestra base fundamental, ya que nos regimos por el Estándar racial internacional, por lo tanto, el cachorro que vamos a elegir debe ser lo más apegado a dicha norma.
Carácter
El carácter es otro de los elementos más importantes que se toman al momento de elegir. Si bien todos los cachorros nacen y crecen en el mismo entorno, cada uno tiene su carácter, en una camada de cuatro cachorros podemos encontrar al colérico, el tímido, el sensible y el sentimental, aunque todos sean de carácter similar, siempre se podrán orillar a un tipo en especial y esto va a determinar el cómo se irán desarrollando durante su crecimiento, es decir, es más fácil que un colérico se acople a los show que un tímido.
Movimiento
Elástico, elegante, ágil, libre y con buena cobertura de terreno.
Textura
El pelaje debe ser duro, alambrado y tupido, ¡muchos pensarán que el tamaño podría ser otra característica importante y sí lo es! pero al ser cachorros, cada línea desarrolla diferente por lo que puede variar de perro a perro y de línea a línea; en cachorros no tomamos como referente el tamaño, sin embargo, recordemos que en adultos la talla es entre 30 y 35 centímetros (cm).
Todo lo antes mencionado no son más que características muy importantes para la selección del cachorrito a presentar, pero ahora te preguntarás ¿cómo es la vida con este cachorrito?, ¿sólo es la selección del mismo?... No, ¡la verdad esto apenas comienza!
Después de la elección del cachorrito debemos tener en cuenta que los entrenamientos, arreglos e idas a exposiciones serán constantes, así que el papel como propietarios es hacer lo posible para que el cachorro sea muy feliz, siempre llevado de la mano de las recomendaciones que los entrenadores y estilistas den respecto a sus hábitos.
El arreglo normalmente será como mínimo una vez por semana, siempre y cuando se piense en competir; uno debe ser constante para que el cachorro se acople al tipo de arreglo, manipulación y estilista, no se debe olvidar que el arreglo de estos cachorros es con una técnica especial y si ésta no es realizada por un profesional en la misma, se podría herir de la piel al cachorrito.
El entrenamiento de igual manera debe ser constante, unas tres veces por semana como ideal, para que vaya agarrando confianza y se enseñe a caminar bien con la correa, sin jalarse; a tenerle confianza y cariño a su manejador para que los resultados sean aún mejores.
Mucha gente pensará que los perritos de exposición sufren o no son bien atendidos, pues no, realmente debemos quitar ese mito, ya que la mayoría de los cachorritos de show son los más cuidados del equipo, los que más atenciones demandan y tienen, ya que por la simpleza de ser cachorros ocupan momentos de dispersión, cariño y contacto humano para que salgan con actitud al momento de ser mostrados.
Para ellos, el ser mostrados es como un momento más de juego con su entrenador y los cachorros mismos saben que si se portan bien, con alegría y juego serán premiados, ganen o no. Debemos recordar que cachorros es igual a juego, entonces la base de todo éxito será el juego con ellos, premiar sus buenas acciones, corregir sus malos hábitos y sobre todo la constancia por parte del equipo, porque detrás de un cachorrito bien presentado está todo el trabajo y constancia de un equipo.
El querer mostrar un cachorrito no es más que un compromiso para que todo salga realmente bien; donde una de las partes falle, el resultado no será el deseado. Pero si todas las partes son constantes, se sentirán los dueños más orgullosos del mundo al ver a su hermoso cachorro concursar.
Nunca olviden que:
“Se puede vivir sin perro, sí... pero no vale la pena.”
Heinz Ruhmann
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