Por Fernando González | Luis Cano | Criadores de Bichón Maltés y Yorkshire Terrier
Con todo el amor en el aire que se respira en esta temporada, no podríamos dejar de lado que nuestros perritos también merecen un detalle, y aunque la mercadotecnia nos ahoga con la temática, debemos no perder el foco en adquirir juguetes que no solo los hagan lucir irresistiblemente adorables; “imagínate a Pallo con ese corazón de peluche y esas alas de cupido”, “ese peluche de tres corazones enlazados podrían hacer muy feliz a Lucca y a Tayra”. “No, mira eso tan suave, se vería vaciadísima Davina con él en la boca para subirla a Instagram”.
La realidad es que es más fácil caer en compras impulsivas de lo que parece. Como lo hemos mencionado antes, los juguetes tienen una gran importancia en su desarrollo cognitivo y estimulación temprana. Afortunadamente cada día las marcas lanzan propuestas según la edad, tamaño o el nivel de energía para nuestros niños.
Los juguetes siempre deben ser una herramienta para bien, sin embargo, no están exentos de presentar algún riesgo, sobre todo en la primera etapa de vida. La exploración es parte natural e instintiva donde la forma y la textura de los juguetes son clave. Pero ¿qué pasa cuando los materiales y calidad no están a la altura? Bueno, pues es aquí donde hay que poner atención.
La mayoría de los juguetes del supermercado no cuentan con estos lineamientos porque van dirigidos a un uso general. Un juguete hecho de tela económica y con costuras débiles, terminará hecho una fiesta de relleno regado, empezando desde la habitación y terminando en sus intestinos, lo cual -en el mejor de los casos- ocasiona solo una diarrea sistémica de tres días.
Por lo cual debemos optar por opciones con telas semirrígidas tipo loneta con costuras reforzadas que soporten el filo de los colmillos de los cachorros, ya que los dientes son más afilados que cuando alcanzan su madurez. Otro tipo muy común son los juguetes de goma los cuales aparentemente son muy divertidos ya que sus características flexibles los hace versátiles para convertirlos en cualquier tipo de forma con rebote, pero seguro aquí más de un lector sabe que son constantes las desapariciones y reapariciones en las heces fecales con forma de confeti.
Aquí es donde aparece la frase de la abuela que dice “lo barato sale caro” y sin intención de mencionar marcas. Todos sabemos que un juguete de menor costo siempre nos va traer menos calidad y mayor riesgo. Elige juguetes acorde a su tamaño, para que interioricen distintos a los del exterior, y si es posible elige los juguetes de inteligencia a los cuales les dedicaremos más adelante un artículo especial.
No olvidemos siempre hacer conciencia sobre lo que ponemos al alcance de ellos, ya sean juguetes o de cosas pequeñas con las que puedan hacer mal uso. Nosotros siempre seremos los responsables. Recuerda que lo mejor que podemos darles siempre ¡es nuestro tiempo!
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